El 1ero de mayo es el día del trabajo, o mejor dicho del trabajador. El término trabajar deriva de Tri (tres) paliare (palos), el tripalium era un artefacto de tortura compuesto por tres palos en el que se sometía a los esclavos. También "laborar" significa vacilar bajo un gran peso, y es curioso que en el idioma en que se busque la etimología de la palabra siempre encontraremos una connotación negativa, de sufrimiento, opresión, etc. Sin perjuicio de esta aclaración, no hay duda que quien llega a su casa cansado de una jornada, come tranquilo su puchero sabiendo que no jodió a nadie, eso es porque el trabajo dignifica, hace sentir merecedor del puchero. Quien obtenga su puchero jodiendo a la gente no lo come tan tranquilo (salvo los cínicos e hipócritas por supuesto).
EL hecho es que nosotros, festejamos el feriado diciendo : "ma' que tripalium nosotro paleamos". Nos encontramos luego del tradicional locro familiar, algunos todavía con aliento malbec a las cinco de la tarde en el club Amarras. Desde alli partimos Darío y Erica (a quien pronto rebautizamos Laura), Jorge R., Gerardo "el cuñado", Sergio B, Sebastian R., Hugo J, Marina y yo. Hicimos rumbo a una playa oeste del lago donde el dueño de la casa costera tiene muy bien cuidada la costa, pasto bien cortado y limpio cuidamos no invadir su propiedad y por ello nos asentamos pasado el mojon de Dipas que delimita la zona de uso público. Ya estaba atardeciendo y de los tambuchos salian pasteles, criollitos y equipos de mate. Luego entrada la noche con todo el lucerío, partimos todos rumbo norte por la costa oeste, para luego emprender el cruce hacía la "boca del embudo", con viento frio de frente habiendo llegado a la costa estabamos al reparo. Apagamos luces y degustando un licor que nunca debe faltar en el tambucho, callamos un rato para disfrutar el cielo y el paisaje nocturno de Carlos Paz (al SUR). Luego volvimos contentos y sin ningún remordimiento, grata sensación que se tiene cuando se comparte tiempo con buena gente. La anécdota de la noche fue que para Laura (en realidad Erica) fue su primer salida en kayak, y para Marina su primer salida nocturna. Diego Pereda (http://litoralenio.blogspot.com/).-
Fotos sacadas por mí, con pilas de Sebastian. La oscuridad de las mismas se debe a que el sol se pone de frente al club.
